El armado entre la marea verde compuesta por una multitud de jóvenes; la lucha histórica de la Campaña por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito, la rosca política; la transversalidad que saltea la grieta y la participación popular en las calles ganaron en la pulseada en la aprobación de la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE). Pero, por sobre todo, fue el triunfo de una democracia más participativa, esperanzada y fresca. Una jornada histórica y con pico de rating en el Senado.
Por Luciana Peker