El panfleto se siente atacado por quienes defienden el conocimiento y la difusión de la realidad.
"El Gordo Dan", como líder de los trol libertarios "confesó que él actúa un personaje violento" (se justifica) el nivel de intolerancia, agresión y distorsión de la realidad que despliega, sobre todo la violencia no se puede justificar, tiene responsabilidad, Milei también actúa el mismo personaje, no se los puede justificar.
Ese conglomerado liderado por este "personaje" y sus seguidores sumado a un sector del periodismo cómplice, más Adorni y el núcleo duro de lLLA se basan en la construcción de una "realidad paralela" o "panfleto" ante una sociedad enojada frustrada resentida a la que seducen con la promesa de venganza.
Ellos actúan su rol, son serios, consistentes defendiendo sus mentiras, antes del desembarco de la lla eran desconocidos, trabajan sobre las debilidades, las ausencias y fallas de la democracia que dejo de tener responsabilidad y defender el destino de las personas de a pie.
Falta una mayor profundidad en los análisis de la realidad, incluir a todos los actores, porque en la puja distributiva lo que no fue a inversión productiva, para distribuir crecer y desarrollarnos "se las llevaron otros", no las personas, no los trabajadores, no las familias.
Con frecuencia se soslaya la responsabilidad de otros actores, a modo de ej. si tenemos una pizza de las 8 porciones toda la política, lo que LLA identifica como "la casta", representa sólo una porción, las otras siete son los medios de comunicación y las redes, el mundo financiero, las corporaciones empresarias, la gremial, los fondos de inversión, el poder económico de los megarricos, las desiciones en que invertir la toman ellos ante la declinación del estado.
La falla central la produjo la política, ese vacío le corresponde a los partidos políticos en lugar de fortalecer y profundizar la democracia, se dejaron colonizar por la corrupción, por los intereses particulares dejaron de defender lo público y lo común.
Sobrevivir la realidad cotidiana es mucho más complejo, no sirve el panfleto, la consigna, el eslogan, la simplificación.
Meterse dentro de la realidad implica desmenuzar los componentes, para entender escuchar valorar las dificultades los matices comprender, para hacernos cargo de la realidad.
Representarla es nuestra tarea el desafío es trabajar acuerdos, respetar la Constitución, la convivencia, demostrarle a la población el daño que le están provocando, fortalecer la Democracia es con partidos y fuerzas democráticas.
El panfleto sostiene que ellos defienden el privilegio, el poder económico, se encargan de atacar a todos los que se oponga personas o sectores, los insultan, los degradan y si hace falta los amenazan (caso Santiago Caputo).
Esta forma panfletaria encontró una respuesta: ¿los partidos políticos? No; ¿los gremios? No; ¿los movimientos sociales? No.
La respuesta vino de los periodistas que dijeron basta, esto tiene que tener un límite, están actuando en defensa de la libertad de expresión como uno de los pilares de la democracia.
El panfleto se siente atacado por quienes defienden el conocimiento y la difusión de la realidad.
La herida al panfleto es porque no los pueden "domar" o comprar y les disputan el terreno de la opinión pública, nació una resistencia tenemos que acompañarla.
(*) Médico sanitarista. Referente radical en Tres de febrero y en la Primera Sección Electoral.
Nota de opinión del 13 de MAYO de 2025.