Luciana Elbusto continúa en el foco de los programas de espectáculos por haber revelado que mantuvo una relación paralela con Diego Brancatelli durante cinco años, noticia que explotó a través de un chat distorsionado que llevó a un extenso peritaje de su celular, lo que dio como resultado un “festín de nombres”, según el abogado Pablo Fioribello.
En principio, el letrado señaló que la investigación fue realizada sobre el celular y la computadora de Elbusto. El trabajo fue realizado por la unidad de ciber delitos de su estudio y el resultado concluyó en un informe de 27 páginas.
En este sentido, Fioribello explicó que paralelamente a la filtración del chat que generó la polémica, a la periodista “le hackearon el teléfono y le vaciaron dos cuentas bancarias”. Según el testimonio, “la pericia arrojó un resultado concreto de cuatro intromisiones de dispositivos externos sobre el teléfono, no sobre la computadora”.
Por tanto, el abogado explicó que el procedimiento no se realizó “para tapar el tema de la relación” ya que finalmente tomó estado público: “Lo que estaba en juego era que el chat que originó todo esto es absolutamente falso, por lo menos el inicial que salió por todos lados. Está adulterado con un programa, algo muy burdo”.
En cuanto a la información hallada en el móvil, el letrado apuntó: “Hay nombres de todo rubro, se harían un festín con esto. Hay políticos, empresarios (...) Luciana sabía perfectamente, desde que se sometió a esta pericia, que eso podía pasar y sin embargo prestó su teléfono sin ningún tipo de miramiento ni contemplación”.
“Hay fotos, videos, hay un montón de cosas en ese teléfono. Será ella o no la encargada de decirlo. De mi estudio no se va a filtrar aunque hay gente que me llama para preguntar quiénes son y otros para pedir que los cuide”, concluyó Fioribello. NA
