Opinión

"Francisco: Un ejemplo de liderazgo global"

LA PLATA, 21-04-2025 | PUBLICADO POR REDACCIÓN

Por  Diego Barovero  (*)  


"Hoy el mundo entero, católicos, cristianos y no creyentes lloramos su muerte luego de celebrar la Pascua de Resurrección, y extrañamos su voz de  alerta en defensa de los desposeídos, los olvidados, los perseguidos y los desahuciados,en un mundo cada vez más habituado al odio, el egoísmo y la idolatría del dinero y el poder"


Hace doce años la historia de la Iglesia Católica Apostólica Romana cambió para siempre. El 13 de marzo de 2013 el Cónclave de Cardenales (los principes electores de la Iglesia) eligió al primado argentino Jorge Mario Bergoglio (SJ) como Sumo Pontífice y éste a su vez decidió llamarse Francisco, siendo así el primer Papa en tomar por nombre el del ‘poveretto d' Asissi’.


Contaba entonces Bergoglio que cuando ya en la quinta votación del segundo día salían las papeletas que iban a alimentar la fumata blanca y que inexorablemente anticipaban su elección como Pontífice por parte sus hermanos, el cardenal Hume (brasileño) que se sentaba a su lado le dijo: "¡No te olvides de los pobres!" y que esa frase lo orientó en la elección del nombre.


Desde entonces y por obra del sucesor de Pedro, comenzaba en la Iglesia un período que se caracterizó por su enfoque en los pobres, la justicia social y la reforma institucional.

No obstante, el momento en que se cumplió este aniversario el mundo se encontró inmerso en la incertidumbre y la preocupación por la salud de Francisco, ingresado en el Policlínico Gemelli con una grave afección respiratoria que obligó al Papa a poner una pausa obligada en su agenda, justamente en el Año Jubilar.


Las constantes especulaciones de los vaticanólogos y los opinadores de ocasión, convertidos de pronto en "especialistas en la nada" inundaron de lugares comunes y afirmaciones de mal gusto y fuera de lugar durante varias semanas, llegando incluso a difundir una "lista" de probables sucesores de Francisco.


Afortunadamente los partes médicos fueron informando que la salud del Papa fue evolucionando favorablemente hasta que ayer fue dado de alta.


La prolongada internación del jefe máximo de la Iglesia no dejó de ser traumática para El Vaticano, el Estado soberano más pequeño del mundo de apenas 44 hectáreas pero cargadas de simbología, historia, cultura, arte y también política. Agreguemos también que se trata de la última Monarquía Absoluta - aunque de carácter electivo- sobreviviente en el viejo continente y que ello suma además otros componentes como la inclinación a teorías conspirativas, imbatibles inspiraciones novelescas y desde luego intereses políticos y económicos.

EJEMPLO DE LIDERAZGO MUNDIAL


Pero más allá de eso y fuera de dudas el papa Francisco se ha constituído por derecho propio y no sólo por la cátedra que ocupa en un ejemplo de liderazgo global que reconocen y admiran mandatarios de distintos países, CEOS de grandes corporaciones económicas, pensadores de las más variadas tendencias ideológicas y conductores de otros credos y religiones.


En las universidades y grandes centros de estudio y del pensamiento, el Papa es cada vez más citado en libros y artículos académicos sobre gestión y liderazgo. ¿Y en su tierra en Argentina? Acá la cosa es más compleja.

EL ARGENTINO MÁS IMPORTANTE DE LA HISTORIA


Indudablemente Bergoglio al convertirse en Francisco se convirtió también en el argentino más importante de la historia, superando a cualquiera de las grandes figuras que nuestro país dio a la civilización ya en deporte, en política y en cultura. Sin dudarlo. Aquél joven enfermizo e introvertido nacido el 17 de diciembre de 1936 que abrazó la fe y la causa de la Compañía de Jesús fundada por San Ignacio de Loyola (Señera en la historia del cristianismo en el mundo especialmente en América), fue ordenado sacerdote el 13 de diciembre de 1969 y llegó a ser Superior provincial de su orden en los llamados años de plomo, cuando se jugó el prestigio y la vida misma para salvar a algunos de sus hermanos perseguidos por los escuadrones de la muerte.


Dichos episodios años más tarde invirtiendo los términos de la historia serían utilizados para desprestigiar a Bergoglio y poner bajo sospecha su actuación, lo que fue desmentido finalmente en honor a la verdad histórica. Años más tarde Bergoglio fue obispo auxiliar de Buenos Aires y finalmente Arzobispo y creado cardenal de la Iglesia por Juan Pablo II en 2001 desde entonces liderando -no sin dificultades internas en el episcopado argentino- posiciones pastorales humanistas bien enraizadas en principios evangélicos. Muchas veces sus posiciones fueron leídas en clave política según el cristal del intérprete y en la era de la revolución de las comunicaciones y la posverdad la difusión de fake news, infamias y calumnias están a la orden del día.


Los argentinos además solemos ser entrópicos y autorreferenciales. Olvidamos que Francisco al ser consagrado el 266 Sumo Pontifice de la historia de la Iglesia Católica se convirtió además de Jefe de Estado del Vaticano en el líder de más de mil millones de católicos del mundo, no solamente de sus compatriotas. Sin embargo y en gran medida por el esmerado empeño de algunos escribas y comunicadores, se ha impuesto exhibirlo como a un vil puntero político suburbano con motivo de tal o cual hecho puntual, algún mensaje o regalo enviado a polémicos destinatarios.


Ello resulta más simple, directo y rentable para presentar ante la sociedad argentina, a la que hace años le inocularon el virus de la intolerancia y la antinomia, en lugar de esclarecerla acerca de profundas razones filosóficas que están en las entrañas del cristianismo. Es decir aquello que Cristo enseñó al mundo cuando se hizo hombre y padeció, murió y se glorificó por la humanidad fue precisamente el mensaje de amor, comprensión y aceptación del otro tal cual es en su sagrada semejanza con el Creador.

CUATRO PILARES


Dicen los especialistas que un auténtico líder basa su liderazgo en cuatro pilares que a su vez son penacho de la orden religiosa a la que pertenece Francisco, la Compañia de Jesús. Estos son: amor, ingenio, valentía y autoconocimiento. De los cuatro ha dado sobrado testimonio nuestro Papa. Y de alguna manera ha conmovido no solo a sus fieles por la fe sino a aquellos no catolicos o no creyentes que supo atraer a partir de su ejemplo, testimonio y compromiso al establecer enérgicamente un nuevo rumbo en la conducción de la Iglesia a través de reformas administrativas, financieras y pastorales de alguna manera más alejada de los oropeles y del poder y más cerca de los que sufren en la carne y en el espíritu. Es digno de considerar que el poder del amor expresado espontáneamente por la humanidad en los recientes días críticos de su internación. La fe y el amor expresados solidaria y abiertamente han sido determinantes en la notoria mejoría evidenciada en las ultimas horas en la salud del pontífice. El Pueblo de Dios quizás inspirado en su propia invocación "Recen por mi" desde aquellos lejanos días de marzo de 2013 cuando sorprendió al mundo la elección de un cardenal "casi del fin del mundo".

Conservemos la esperanza de seguir contando con Francisco y con su voz. Su voz es la voz del amor fraternal que Cristo nos enseñó, imprescindible en esta hora en que resuena la voz de poderosos solo empeñados por conseguir más riquezas y más poder.


(*) Es abogado, egresado de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires. Fue docente de Derecho constitucional en esa casa de estudios y es actualmente profesor titular de Derecho en el Colegio Nacional de Buenos Aires. También es profesor adjunto en la Facultad de Derecho de la Universidad de Lomas de Zamora. Es funcionario de carrera de la Dirección General Impositiva, Administración Federal de Ingresos Públicos, desempeñando actualmente la jefatura de la División Revisión y Recursos de la Dirección Regional Sur. Es escritor e historiador, ha publicado trabajos y notas en diversas publicaciones dedicadas a la historia como las revistas Todo Es Historia e Historias de la Ciudad. También  es columnista y colaborador en periódicos de circulación nacional como La Prensa, Clarín, Ambito Financiero, Tiempo Argentino y también en  Democracia (Junín), Acción (Arrecifes), El Argentino (Capitán Sarmiento), La Reforma (La Pampa), entre otros. Es autor de libros como “Ricardo Rojas. De las letras a la política” (1998), “Arturo Mor Roig. Entre el ensueño y el sacrificio” (2008), “UCR. Su historia, su doctrina, sus nombres” (2010), “Caudillos y protagonistas políticos en La Boca del Riachuelo” (2013), y en coautoría “Raúl Alfonsín. Juicios más balanceados” (2009), “UCR 1891/2011120 años de historia en sus documentos y aportes doctrinarios al pensamiento argentino” (2011) y “La Palabra Esencial. Antonio Porchia y sus Voces” (2014).Es miembro de número y vicepresidente del Consejo Directivo del Instituto Nacional Yrigoyeneano Ley 26040.Es secretario de la Agrupación de Gente de Arte y Letras Impulso, del barrio de La Boca. Es miembro fundador y directivo de la Junta Auténtica de Historia y Cultura de La Boca del Riachuelo. Dirigente de la Unión Cívica Radical, candidato a diputado nacional por la Ciudad de Buenos Aires (2005), es actualmente miembro de la Honorable Convención Nacional.

Nota de opinión publicada en La Prensa el 21de abril de 2025