En el marco de los pronunciamientos por el Día del Periodista, Enrique de la Calle, editor responsable de contenidos de la agencia Paco Urondo, referenciada con el peronismo kirchnerista, dijo que trabajan con el compromiso y conciencia de “ser militantes que hacemos periodismo”, aunque abrazar una causa con la comunicación como herramienta “no significa hacer difusión ni publicidad oficial, porque ya el gobierno tiene sus organismos”.
Lejos de molestarle el concepto de periodismo militante, De la Calle lo reivindica porque “es un trabajo hecho por militantes políticos en el terreno de la comunicación, reconociéndolo como un espacio de disputa de poderes desde lo simbólico”.
Por esto, el periodista de la agencia kirchnerista toma distancia de los medios más poderos que transitoriamente están encolumnados con el oficialismo por conveniencia económica o pautas publicitarias y hacen una defensa permanente y acrítica de todas las acciones del gobierno.
“Nosotros primero somos militantes políticos. Por eso queremos que a nuestro espacio le vaya bien y contribuimos desde nuestro lugar. Pero tratamos de chequear cada información manteniendo la verdad. Porque ser parte de un movimiento político no te habilita a mentir ni decir cualquier cosa, en defensa de un bien superior como podría ser un gobierno. Tenemos una pretensión de verdad, buscamos que nuestros planteos sean rigurosos y basados en datos”, señaló De la Calle.
Al respecto, y en diálogo con el ciclo “No es lo que parece”, de la 96.7 Mhz. el directivo de Paco Urondo agregó: “A veces los oficialismos tenemos que tener cuidado de no caer en la publicidad de un gobierno, aunque somos parte del movimiento político que gobierna. Aunque alguna vez hemos caído en eso, hemos hecho autocrítica sobre la reproducción automática y acrítica de cosas de un gobierno. Debemos reconocer que no somos órgano de difusión del gobierno, queremos cumplir un rol para que el gobierno sea cada vez mejor, no es nuestro rol hacer publicidad del gobierno”.
Esta convicción de trabajar con rigor periodístico por una causa previa, nace desde el reconocimiento “de ver al periodismo como un campo o espacio donde se pueden dar en lo simbólico y cultural las discusiones políticas profundas de una sociedad”.
Por esto, De la Calle reivindica el concepto de periodismo militante como un rótulo propio: “no compartimos que se diga periodismo militante del PRO o de otras fuerzas de derecha, porque estaríamos regalando el título de militancia política y es prestigiosa para tirársela a cualquiera. En todo caso hacen periodismo por otros intereses, pero no como extensión de la militancia”.
Periodismo de guerra
Además del análisis autorreferencial el periodismo militante, De la Calle dijo que prefiere esto al “periodismo de guerra que han asumido los medios hegemónicos contra el gobierno, por su pertenencia peronista, por el populismo o por combatir al kirchnerismo como frente político”.
“Hoy vemos con redacciones que se hacen llamar profesionales e independientes, siguen haciendo coberturas de la pandemia y la campaña de vacunación que ponen de manifiesto una total irresponsabilidad. Caen en aberraciones tremendas que en contexto de pandemia son gravísimas”, afirmó De la Calle, que agregó: “paradójicamente, esos grandes medios son los que reciben más pauta oficial del gobierno al que castigan, porque el gobierno tiene temor a enfrentarlos”.
Por esto, dijo que prefiere “por más rótulos o errores que nos enrostren, el periodismo militante al periodismo de grupos hegemónicos, que sostiene su trabajo en base a campaña de fake news y mentiras permanentes como dinámica instada”.
Comunicación del gobierno
Por otra parte, el director de Paco Urondo reconoció errores del gobierno nacional en la comunicación oficial en torno a la gestión de la pandemia, producto de la falta de unificación de un discurso homogéneo y la pluralidad de voces frente a algo “tan desconocido como el virus y su impacto”.
“Hubo errores de comunicación anunciando por ejemplo que se iba a vacunar a 10 millones de personas entre enero y febrero. Eso generó expectativas sociales que no se pudieron cumplir por los contratos de provisión. Hoy está teniendo campaña exitosa pero siempre le van a recordar que prometió vacunar a 10 millones para febrero. Apresurarse en eso le costó caro”, señaló el periodista.
Del mismo modo, también cuestionó “el carácter irregular de la comunicación y las fallas para mantener un discurso constante sobre un mismo tema”, ya que “en todo momento hablan todos los funcionarios a la vez y entran en contradicciones, más allá de la buena voluntad que se tenga, porque pueden tener informaciones distintas”.
En ese sentido, De la Calle estimó que “esto puede darse en gran medida por tener que enfrentar una pandemia para lo cual no estábamos preparados”, aunque reconoció que “la diversidad de voces y opiniones es el resultado de la heterogeneidad de origen del Frente de Todos. lo cual amplifica ciertos cortocircuitos”.
Por último, se refirió a los esfuerzos de la agencia para sostenerse en un contexto de restricciones y poca actividad que afectan los ingresos. “Nosotros sufrimos la pandemia uno que fue Macri, cuatro años en el llano absoluto y después vino la que vivimos ahora; todos vivimos de salarios extras a la Paco Urondo, que tiene ingresos pequeños. Estamos en un contexto difícil, pero a partir de la organización política hemos logrado sobrevivir y a su vez encarar nuevos desafíos porque hay cada vez más medios de comunicación y hay que encarar nuevos emprendimientos en redes sociales y un nuevo contexto de pluralidad de información”, concluyó. (Cadena BA)