En la primera imagen, la artista mostró un arroyo que desemboca en el océano. Junto a la postal escribió: “Everyday school - la escuela de todos los días-”. Sin embargo, más adelante, dejó impactados a quiénes visitaron sus anécdotas.
Junto a un cúmulo de bosta de caballo, creció un hongo. La imágen del desecho y el descomponedor tuvo su toque maestro con un rayo de sol en medio. Allí, la intérprete reflexionó: “Vida Maestra. La belleza de la bosta. Ves que de la mierda salen cosas hermosas”. NA