El portavoz presidencial, Manuel Adorni, afirmó que el Gobierno nacional quiere que este miércoles "sea una jornada en absoluta paz" y ratificó la decisión de "garantizar la libre circulación" ante la movilización anunciada por la Unidad Piquetera, que marchará a la tarde desde el Congreso hacia la Plaza de Mayo, en el marco de un nuevo aniversario del estallido social de diciembre de 2001.
"Mañana queremos tener una jornada en absoluta paz. La Argentina tiene que acostumbrarse a una normalidad tan simple como el del estricto cumplimiento de la ley", insistió Adorni en la conferencia de prensa que ofreció en la Casa Rosada al término de una nueva reunión de Gabinete encabezada por el presidente Javier Milei.
Al respecto, el vocero presidencial ratificó que quien participe de algún corte de calle "dejará de percibir el plan social", tal como ratificó el lunes la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, y reiteró que la línea telefónica 134 estará abierta para "recibir denuncias de aquellos que se sientan amenazados por un intermediario".
Adorni reafirmó que, para el Gobierno nacional, la "decisión está tomada y es hacer cumplir la ley" en relación al protocolo de orden público dispuesto por el Gobierno nacional, que será aplicado mañana por primera vez durante la movilización prevista por la Unidad Piquetera que marchará desde las 16, en el Congreso a la Plaza de Mayo.
"La decisión está tomada y es hacer cumplir la ley. Vamos a permitir la libre circulación. Tenemos la absoluta tranquilidad de que vamos a hacer todo para que se cumpla lo que el presidente (Javier) Milei viene pregonando desde la campaña", sostuvo en la conferencia de prensa de hoy.
Al respecto, el funcionario sostuvo que tanto Milei como otras voces del Gobierno han "repetido hasta el cansancio que no queremos que se corte la circulación en Argentina".
"Si van a marchar, que es un derecho constitucional el de marchar háganlo como lo marca la ley y respetemos el protocolo de la resolución ministerial de la cartera de Seguridad".
Finalmente, reafirmó que el Gobierno "no está dispuesto a que el puntero, el intermediario, el dueño de la organización o quien sea haga un negocio propio o le quite al que más lo necesita" y agregó: "El negocio con los pobres se terminó". (Telam).-