Esta costumbre comenzó en la víspera del segundo partido, ante México, pero desde la vez anterior, en la previa del encuentro con Países Bajos, dispone de un despliegue de seguridad que impide cualquier tipo de desborde con la intención de no afectar a los locales circundantes.
La cita incluye a muchas familias con niños y se sumaron los argentinos que arribaron en los vuelos especialmente programados por Aerolíneas Argentinas después de la clasificación a las semifinales.
La alegría de los argentinos se puede escuchar mediante cantos por Messi, Maradona y la Selección. Pero lo que une a todos es la euforia de ver a Lionel Messi en el mundial, sin distinción de países.